Descripción
7 x 52 x 115 cm
Una de nuestras sillas favoritas. Nos gusta tanto esta silla que la producimos
desde hace muchos años, esta silla es casi tan vieja como Campoloco. Nos
gusta lo sólida que es a nivel de carpintería, pero lo ligero que es su diseño
debido en parte a los barrotes verticales del respaldo. Posiblemente, su
elemento más característico sea el emparrillado que se forma en la parte
superior del respaldo, dando ese toque especial a la silla.
Se puede apreciar en las fotos la gran calidad de la teca utilizada tanto en la
estructura de la silla con secciones cuadradas como en el asiento de la silla
con tabla de la primera calidad. En esta ocasión el asiento no es de tablilla, si
no que es un conjunto único y sólido, consiguiendo una superficie uniforme y
suave.
Para dotar aún de más resistencia al conjunto en las patas se han llevado a
cabo dos actuaciones distintas. Por un lado se han unido todas ellas en la
parte inferior para que el sistema funcione como un todo. Por otro lado, en la
intersección entre la pata y el asiento se han utilizado escuadras de madera
para que nunca se pierda esa perpendicularidad con la que fue diseñada.
Una silla que si te gusta, no te va a decepcionar en cuanto a comodidad,
resistencia y uso. Te va a acompañar en tu cocina o en la mesa de tu
comedor por muchos años y va as ser testigo de honor de todas esas
buenas noticias que están por venir.